Salud

Beneficios del Pan Para la Salud

Pan
Nuestras abuelas sabían sacar mucho partido a una simple hogaza de pan, sobre todo del pan duro que quedaba en la alacena. En una época donde no se tiraba nada, el pan se utilizaba para mil asuntos. Desde curar un dolor de garganta a aliviar un estreñimiento, todo tenía solución si había pan a mano.

Dolor de garganta: Un viejo remedio contra esta habitual molestia consistía en tostar una rebanada de pan y mojarla en vinagre caliente. A continuación, las abuelas recomendaban chupar la tostada hasta extraer todo el vinagre y luego comerla. El vinagre desinfectaba la garganta y la tostada la suavizaba.

Pan laxante: Para combatir el estreñimiento, las abuelas solían preparar un pan de salvado que era muy eficaz para combatir este problema.

Necesitarás: ½ kilo de harina integral, una cucharada sopera de salvado de trigo, media cucharadita de sal, 15 gramos de levadura, una cucharada de miel y medio litro de agua.

1- Mezcla la levadura, la miel y parte del agua (un vaso). Deja que repose 5 minutos.

2- Añade a esta preparación la harina, el salvado y la sal.

3- Amasa bien y dale forma de barra. Tapa con un trapo y deja que repose hasta que la masa suba.

4- Pon en el horno durante 40 minutos.

Astillas bajo las uñas: Es un accidente molesto y difícil de solucionar. Si se te clava una pequeña astilla o una espina bajo la uña, podrás eliminarla fácilmente clavando el dedo en una gran miga de pan. A continuación, retira el dedo muy lentamente y ya verás como la astilla o la espina quedan clavadas en la miga y se van con ella.

Desinfectar heridas: Antiguamente, se evitaba que las heridas o forúnculos se infectaran con esta cataplasma de pan. Se preparaba añadiendo a la miga tierna yema de huevo y un poco de leche. Se aplicaba sobre la herida y se dejaba actuar durante una media hora.

Orzuelos fuera: Las cataplasmas de miga de pan y leche caliente, bien escurridas y aplicadas sobre el ojo cerrado, ayudan a que el orzuelo madure y sane mucho más rápidamente.

Vahos de pan contra el resfriado: Una vieja receta asegura que si ponemos a cocer pan en agua a fuego muy lento e inhalamos el vapor que desprende durante media hora, se alivian considerablemente los síntomas del resfriado.

Resaca con pan: Para paliar los desagradables síntomas de la resaca toma, para desayunar, una rebanada de pan tostado con miel. El pan, al ser rico en hidratos de carbono, te ayudará a subir los niveles de glucosa en la sangre y la miel permitirá que tu cuerpo elimine el alcohol de tu cuerpo con mayor rapidez.